El porno convencional y su evolución
Nuestra psicóloga sanitaria y experta en terapia sexual y de pareja, Marta Roldan Alemany, ha escrito un artículo sobre la historia del porno y su evolución a lo largo de los años. Con este artículo ha buscado dar pie a la reflexión sobre las tendencias pornográficas falo y hetero centristas de la sociedad actual y así, reconducir la educación sexual hacia una perspectiva más natural e igualitaria entre ambos sexos.
El porno lleva con nosotros desde la edad media y ha ido evolucionando a lo largo de los años según las culturas y tendencias de cada época. Hoy en día, el porno sigue una tendencia que, en opinión de la experta en sexualidad, Marta, es peligrosa ya que el acceso al mismo, por parte de los jóvenes, es cada vez más prematuro y esto provoca, que puedan concebir creencias equivocadas y falsas expectativas sobre las relaciones sexuales.
Con falocentrismo se refiere al porno que está hecho por y para el hombre, donde suele ser dominante y la relación acaba cuando este eyacula. Esto provoca que el sexo se centre, únicamente, en provocar placer al hombre, cosificando así a la mujer.
Algunas de estas conductas que se suelen dar en el porno y que pueden generar ciertas distorsiones en una relación sexual real son las siguientes:
- La mayoría son mujeres operadas. Se consideran unos cuerpos específicos como aquellos que pueden dar o recibir placer. Esto puede acomplejar a mucha gente, así como hacer a otras personas orientar sus gustos a unos cuerpos definidos dentro de unos aspectos artificiales. Esto quiere decir que estos cuerpos son artificiales y, por lo tanto, difíciles de encontrar. Dado que no existen de una forma natural.
- Se suele enfocar a la mujer como un objeto. Los planos suelen estar desde una perspectiva del hombre, donde se ve a la mujer, su cuerpo. Pero pocas veces es al revés.
- En la mayoría de los vídeos porno si hay una relación homosexual, siempre va a estar protagonizada por dos mujeres, en el caso de que se realice un trío, o sexo en grupo, con más de un hombre, el contacto entre los varones es nulo. Esto muchas veces deriva en que los hombres se vean más reticentes a tener experiencias con otros hombres por miedo a prejuicios.
- Los vídeos terminan cuando el hombre eyacula. Parece que las relaciones sexuales se acaban cuando el hombre eyacula. Esto no tiene por qué ser así, la relación puede seguir de otro modo. No es necesario que todo el placer que de un hombre se dé con el pene erecto, se pueden hacer muchas otras cosas. Esto fomenta el miedo que pueden tener los hombres a tener una eyaculación precoz o la disfunción eréctil, dado que sienten que la responsabilidad de dar placer a la otra persona está en su pene.
- Las mujeres nunca tienen la menstruación. La menstruación es un fenómeno natural, le pasa a la mayoría de las mujeres, sin embargo, se sigue teniendo como un tabú en el mundo del porno. Esto se parece a cuando las mujeres no podían entrar en la iglesia cuando estaban en periodo de menstruación. Ahora pasa algo parecido, pero con los estudios de grabación pornográfica. Se sigue considerando la menstruación como un fluido tabú.
- Ausencia completa de vello femenino. Siguiendo el hilo de lo natural, se promueve el que las mujeres se tengan que depilar prácticamente todo el cuerpo. (exceptuando cabeza y cejas).
Se podría hablar de muchas otras conductas que hacen de la pornografía una fuente de desinformación para la gente que construye su deseo y su erótica a través de esta, pero estos ejemplos son suficiente para obtener una visión general la tendencia equivocada de la pornografía actual.
El postporno, una nueva alternativa
A raíz de todo esto, surgen nuevas tendencias pornográficas como el postporno que reivindican las tendencias mencionadas anteriormente y que se basan en la igualdad entre ambos sexos. Buscan mostrar la naturalidad de una relación sexual real. Suelen ser performance donde se muestran a mujeres con la menstruación teniendo relaciones sexuales, una diferencia de edad muy alta entre los participantes de la relación sexual, relaciones sexuales donde domina la mujer, cuerpos diferentes y variados etc. Este nuevo género realiza una crítica al porno convencional ya que quiere llegar a excitar a través de lo no convencional, de lo extraño para la mayoría. Resaltando que además de ser una crítica a todos los tabús, busca la excitación del espectador.
Porno educativo, la mejor opción para educar a la sociedad
Por último, Marta Roldan menciona una propuesta muy mencionada últimamente que busca acabar con estas tendencias del porno convencional. La creación de un porno educativo que sustituya o por lo menos, conviva con el porno convencional. En este porno se proponen cuerpos diferentes, naturales (siempre teniendo en cuenta los cánones de la sociedad en la que vivimos, dado que la pornografía busca excitar). Con una perspectiva de ambos géneros en la relación sexual, que estas prácticas no estén tan heterocentrizadas. Donde se vea erótico poner un preservativo, donde podamos ver penes sin erección, menstruaciones o pubis no depilados. Algo más natural, pero con un fin erótico de que pueda ser erótico. La experta considera que esto podría ayudar en el futuro a muchas personas con respecto a muchas disfunciones sexuales y al mismo tiempo se podría generar una visión del sexo mucho más saludable para la población.